PROFUNDIZANDO NUESTRA MEDITACIÓN

1. Empezar con una oración. Con cualquier palabra que venga del corazón para invocar la presencia de Dios.

2. Cantar o hacer una lectura inspirativa. Para poner  la mente en un estado devocional.

3. Práctica de las técnicas de meditación.

4. La práctica de la quietud. Para disfrutar del beneficio de los esfuerzos hechos durante la práctica de las técnicas. La quietud siempre viene acompañada por un sentimiento de alegría. Cuando la calma empieza a desvanecerse es hora de la práctica de la devoción.

Historia del devoto que decía que comulgaba con Dios. ¿Qué le decías a Dios? Nada, sólo escuchaba. ¿Qué te decía Él a ti? Nada. También escuchaba. En esa quietud es donde se produce la comunión con tu Ser más elevado.

5. La práctica de la devoción.  Hablar con Dios o rezar por otros o por nosotros.

EMPIÉZALO  

¿Tienes una ambición secreta? Si tuvieras la oportunidad de empezar una nueva vida, ¿qué harías?

La vida te ofrece esa elección. La arcilla moldeable del tiempo está en tus manos para que la moldees como quieras. A menudo el logro que parece imposible es el más lógico. Ese que pensabas que no podías hacer, ¡empiézalo! Arroja las trabas autoimpuestas de los hábitos del pensamiento que son tus únicas limitaciones. Escucha el susurro interno. La vida guarda buenas sorpresas para aquél que cava profundamente en el pozo del Ser.

Ninguna meta se consigue en un día. Lo único esencial es que empieces AHORA no mañana. ¡Empieza! Este mágico momento es la llave a las cuevas del tesoro de la oportunidad. Abre el grifo de la genialidad, cuya única fuente está en el Infinito. Da el primer paso por muy pequeño que sea. Tu poder liberado, como la bola de nieve, acumulará más por si mismo.

“La habilidad es responsabilidad hasta el último extremo”. Tu talento latente es una semilla confiada a ti para que te ocupes de ella. ¿Acaso tienes tú el derecho a dejarla secar en el árido suelo de la dilación? La vida sólo te pide que coseches fielmente  aquello que se ha plantado dentro de ti. Todo lo que necesitas para esa tarea lo tienes a mano. Reconócela con los ojos de tu consciencia despierta.

Trabaja, no con esfuerzo tenso y lleno de deseo, sino con tranquilidad y alegría. No ames  la meta más que el hacer. Con mente alerta y manos amorosas teje con las hebras relucientes del AHORA el modelo de la eternidad y, si el  recipiente se hace añicos por un toque descuidado o por un viento caprichoso, no llores. Con el corazón más rico con la comprensión, con mano más habilidosa y ojo más certero ¡EMPIEZA otra vez! Simplemente ¡empieza! Sólo en eso está la genialidad.

En el corazón de la semilla duerme la flor. Pero, ¿sabe la semilla su propio principio o su propio final? Recogiendo lo que puede de calor y humedad, el corazón expandido de su propio ser estalla en alegría para saludar al sol.

La vida te suplica e incita  a la acción. En este día hazte consciente de esa urgencia dentro de ti. Rompe el caparazón de tus limitaciones. Gira tu cara hacia la luz y da un paso hacia delante, hijo elevado del hombre.

                                                 Sraddha Mata (SRF)